¿Crees que soy mal conductor?

Seguro.

Me negaba a creerlo, pero poniendo un poquito (no mucha) de atención me di cuenta de mi calaña.

Como con muchas otras cosas, espero ir cambiando las maneras.

Rebasándo el título de la entrada, hace unos días N. me presto "La identidad", un libro de Milan Kundera, buen autor recién presentado que rapidamente se vuelca en otros dentro de mi pequeña cabeza.

Como en la mayoría de sus libros (leídos por mi), Kundera sustenta un ensayo en los personajes propios de la novela. Es una historia de amor tortuoso que se plantea las mismas ideas que Agnes Heller describiera en su "extranjerismo mental", de las probables e inverosímiles tranfiguraciones, que gira y dobla hasta llegar al final que... bueno...me recordó mucho "Brazil", de Terry Gillian.

Es una obra recomendable para leer en una tarde de aburrición (del tipo pasivo, como lo catalogase el propio Kundera). Así que si no lo han leído, mejor lean "La insoportable levedad del ser"... díganle a N. que se los preste...no creo que lo niegue.

Otro libro que acabo de leer, de pasada también, fue "Tiempo de Alacranes", de Bernardo Fernández.

Después de haber leído sus compilaciones de cuentos cortos como "BZZZZZZZZT!" y "El llanto de los niños muertos" esperaba que su incursión a la novela me hubiese satisfecho plenamente, pero en cambio me pareció un cuento de SUB (gotta read) elongado a la fuerza y por tanto diluyendo la chispa que caracteriza los cuentos del buen BEF en esporádicos led's cenitales.

El argumento da para un guión bastante decente de una película o un comic (Ha,ha,ha,ha,ha Latveria)... y por esta idea me inclino a pensar que mi problema fue no poder imaginar las escenas adecuadamente... todo el libro apareció en mi cabeza con una mala fotografía al puro estilo de las películas proyectadas en "galavisión". Si les gusta el género narco-punk... éste es su libro... una especie de adaptación de "Ghost Dog" (con Forest Withaker).

Como nota final les pido, por favor, prestarme libros... que acabo de redescubrir lo bolonio de ir a comprarlos (o regálenme dinero, si no quieren prestar).

Escuchando: Last One Standing - Ladytron